Buenas a tod@s
Después de una trepidante temporada marcada por los PROTOCOLOS COVID-19, medidas de restricción de movilidad, aplazamientos exprés, cambios de última hora y la nieve de FILOMENA, es momento de hacer un cierto balance.
Hoy me voy a centrar en la forma en que los entrenadores hemos afrontado la parte psicológica de la temporada, y lo voy hacer ayudándome en algunas reglas del entrenador de la NBA Doc Rivers (actualmente en lo Sixers de Philadelphia).
Estaba viendo un reportaje suyo en NEFLIX y pensé en un montón de cosas que podía escribir para todos nosotros. Empezare por el final, ¿qué piensa él de SER ENTRENADOR?.
Es importante verlo al principio, pues así comprenderemos mejor las ideas que tiene de como afrontar los retos que se nos presentan en nuestra labor de entrenador y como siguiendo ese camino ( buscar cada uno su camino), todo se puede conseguir.
Las ideas principales de su discurso se centra en:
- Acaba lo que empezaste, no te rindas. Sigue hasta el final.
- No te hagas la victima, nada gira alrededor tuyo.
- Busca una filosofía de vida.
- La presión es un privilegio.
- Haced vuestro trabajo muy bien. Me imagino que nadie quiere hacerlo mal, El problema es cuando no salen las cosas como tu quieres, como has planificado o pensado. Ese es el principal problema. Hay que reinventarse, preguntar a entrenadores más expertos o estudiar más soluciones. Cuando le oía pensaba en la palabra HUMILDAD. Hemos de ser humildes en nuestro trabajo, aunque tengamos grandes expectativas y sepamos que podemos conseguirlas. De esta forma seremos mejores entrenadores y en consecuencia mejoraremos nuestro trabajo.
- El GRUPO lo más importante. Ell@s son lo importante. Estamos aquí por nuestros deportistas, así que pensemos en todos ellos. El otro día veía un reportaje sobre los marines americanos. Decían que un grupo de asalto era igual de débil como el peor de sus eslabones, y no era tan fuerte como el mejor de sus miembros. Lo comparto, aunque hay entrenadores que no. Veo jugar a mucho sexteto titular a nivel de formación , y ¿qué pasa cuando hay lesiones, confinamiento, etc?. No trabajas para jugadores trabajas para un equipo.
- TRABAJA MUCHO. YO lo tenía claro cuando empecé. Si quiero ser buen entrenador tengo que seguir aprendiendo y trabajando siempre. Preparándome a tope, para cada año ser mejor, tener más herramientas para enseñar a mis jugadoras, saber más de los rivales, estar por delante de ellos. Hay poco descanso en esta actividad, mejor dicho, el descanso es un tiempo de reflexión. Me gusta realizar un DAFO (Debilidades, Amenazas., Fortalezas y Oportunidades) de la temporada y buscar soluciones para equilibrar lo positivo con lo negativo, diseñar ejercicios para buscar el crecimiento del equipo (individual y colectivo) y de esa forma que mis equipos tengan más y mejores herramientas en el juego.
- GRANDES EXPECTATIVAS. Cuando comienza una temporada todos tenemos una idea de lo que el equipo da, pero hemos de pensar en lo que queremos que den. Entrenamos pensando en la clase de jugadores que queremos tener a partir de un instante y el crecimiento que vamos a desarrollar en ellos. Tenemos que ser realistas sobre la valoración que hacemos del equipo (el DAFO es un buen instrumento) y a partir de ahí poner un objetivo. UN FOCO de atención para todos. Pero primero tiene que creérselo el entrenador para poder transmitírselo a sus jugadores.